Originalidad, Creatividad y Ciencia


Por Santiago Castro
En el año 1971 el mítico antropólogo y erudito Gregory Bateson declara: “… el estado actual de las ciencias de la conducta: una masa de especulaciones cuasi teóricas no conectadas con ningún núcleo de conocimiento fundamental”1, se vivía uno de los períodos más ricos del desarrollo de las ciencias de la conducta. El mismo Bateson encabezaba la llamada Escuela de Palo Alto, la cual se configuraba como un movimiento bastante heterogéneo que agrupaba a científicos de distintas áreas.